camuflada en las arterias, sin pensar, sin ser inerte
La precisión de los recuerdos nos hace levantarnos
y volver sin seguir vivo, y seguir amando, a pesar
del cielo que quiso detener el busca y captura
de tus manos, eternas en un mundo de medios
silencios, medias verdades, medio corazón sin piel
Las rodillas seguirán flexionadas
El apetito sin frenos, la mirada gacha y desdoblada
Cuerpo a tierra, dijo algún militar temeroso
Tierra que castiga meses de desobediencia severa
Boca a tierra, pecho a tierra, alma a tierra y ser
un violinista sin cuerda en el metro más grande del mundo
Y oye, que te echo de menos. Pero no se lo digas a nadie. Ahora voy a poner a secar las maderas de mis cimientos. Y dejaré que el sol me lleve y la corriente me arrastre hacia donde otra vez tu imagen me martillee las pupilas. Dilatadas a causa de un legado de escombros. Ahora seguiré ignorando que ya no hay espacio para el pasado en esta jaula de materia y celos. Ahora sólo soy otro puto folio en blanco, ¿no me ves? Y ni el mejor de los poemas será comparable a tu sonrisa.
No me escribas. Recíclame.
No me escribas. Recíclame.
Comentários:
Publicar un comentario